Lúgubre tarde la de ayer para El Peronista, aquel que con su estampita en mano y a pesar que los años le han robado la juventud del rostro nunca apagó el fervor de su alma, aquel que Perón supo grabar en su espíritu.
La novela de ayer fue un recuadro más en esta historia de hombres que han reciclado su ropaje de vendedores a vendidos, de gerentes a cadetes, de pescadores a carnada.
Riña de gallos por tener en su desplumada mano una mínima chance de aferrarse a las abrazaderas del féretro y ser más papistas que el papa. Toda la jornada fue como un juego de cartas, una retrucada donde los cuatro de copas han sido los personajes de una mala movida.
En primera instancia Kirchner no estuvo de acuerdo con que el traslado se realizara, claro! si hay algo que no le agrada es venerar muertos, pero luego vio la veta política que le hacía falta para captar en sus filas la oposición mas fuerte dentro de su territorio, los que siguieron manteniendo los vestigios reciclados de la política del “Pocho”.
No hay nada más lejos de la simpatía de Kirchner que el peronismo, pero esto no le impidió utilizar el Partido Justicialista para lograr su repentino ascenso en política, tan puro como las aguas de Riachuelo.
Detrás de la cortina de humo que enarboló Quiróz con una 9mm en mano, hay un silencio cómplice por parte de los funcionarios nacionales con la responsabilidad de justificar, por qué San Vicente fue zona liberada durante la tarde de ayer. Qué autoridad puede tener la 62 Organizaciones para determinar la seguridad de un evento tan trascendente?
Moyano vs Medina,
¡terminó la función! los títeres se pelearon por tener un lugar en el palco, comediantes desechables de la obra K.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario